Me encanta el pastel desmoronado. Crujiente por arriba, crujiente por abajo. Y en el medio, está lleno de fruta. Una receta ideal en esta época del año con los diversos frutos rojos y moras que tenemos a nuestra disposición. Prueba también esta receta con albaricoques. 👌
Para 4 personas :
- 1 masa quebrada
- 400 g de frambuesa
- 200 g de arándanos
- 2 cucharadas de azúcar moreno
- 2 cucharadas de polvo de almendras
- 30 g de harina
- 30 g de mantequilla
- 30 g de azúcar en polvo
- 30 g de almendras trituradas
- 1 yema de huevo
1- Lijar entre las manos la harina, la mantequilla, el azúcar glass y la almendra triturada.
2- Colocar en un lugar fresco.
3- Forrar un molde de tarta de 20 cm de diámetro con la masa quebrada. Guardar recortes.
4- Coloque una hoja de papel pergamino y agregue pesos para hornear (o legumbres).
5- Precalienta tu horno a 180°C y hornea por 15 minutos. Retire los pesos y continúe cocinando durante 10 minutos.
6- Extienda el polvo de almendras, luego agregue la fruta y espolvoree con azúcar moreno.
7- Añadir el crumble crumble.
8- Si quieres hacer la misma decoración que en mis fotos, estira los restos de masa quebrada y corta una tira larga de 1 cm de ancho. Colóquelo alrededor del pastel, plano en el borde de la sartén.
9- Glasear con una yema de huevo.
10- Precalienta tu horno a 180°C y hornea por 15 minutos.