Acompañados de una pequeña ensalada verde y una salsa de queso blanco y limón, estos pasteles son una muy buena cena, fresca y ligera.
Como hierbas, agregué cilantro, menta y perejil. Puedes variar tanto como quieras. Me imagino el perifollo ideal para reemplazar el cilantro.
Para 4 pasteles pequeños:
- 150 g de harina T45
- 3 huevos
- 10cl de leche
- 50 g de parmesano recién rallado
- 3/4 de un sobre de levadura
- 5 cucharadas de aceite de oliva
- 2 cucharadas de menta picada
- 2 cucharadas de cilantro picado
- 2 cucharadas de perejil picado
- 2 cucharadas de piñones
- 1 diente de ajo
1- Mezclar las hierbas con el diente de ajo desgerminado, los piñones, 1 cucharada de parmesano y 3 cucharadas de aceite. Reserva este pesto.
2- Mezclar la harina con la levadura y el resto del parmesano en un bol. Añadir los huevos, la leche y el aceite restante y batir hasta obtener una mezcla homogénea.
3- Añadir el pesto de hierbas, sal y pimienta.
4- Verter en un molde pequeño para torta y hornear de 30 a 40 minutos en horno precalentado a 180°C.