¡Finalmente me metí en un buen helado de vainilla casero! No demasiado dulce, cremoso y con un buen sabor a vainilla. Una delicia !
Y para utilizar 3 de las claras de huevo, te invito a (re)descubrir la tarta de frambuesas invertida visitandine.
Para 6 personas :
- 2 vainas de vainilla
- 30 cl de leche entera
- 4 yemas de huevo
- 50 g de azúcar
- 1 cucharadita de maicena
- 30 cl de nata para montar entera
1- Corta las vainas de vainilla por la mitad y recoge las semillas con el dorso de un cuchillo.
2- Vierta la leche, las semillas y las vainas de vainilla en una cacerola y deje hervir a fuego lento. Dejar en infusión durante al menos 30 minutos (o toda la noche para permitir que los aromas se multipliquen) y luego retirar las vainas.
3- Mientras tanto, bate las yemas con el azúcar y la maicena hasta conseguir una mezcla espumosa.
4- Añadir poco a poco la leche caliente sin dejar de batir para evitar que se cocinen las yemas.
5- Vuelva a verter todo en la cacerola y cocine a fuego lento, revolviendo constantemente, hasta que la crema espese como una natilla.
6- Dejar enfriar completamente, primero a temperatura ambiente y luego en la nevera.
7- Cuando esté listo para montar en la heladera, verter la nata en la crema pastelera, mezclar y montar en la heladera hasta que se formen bolitas.
8- Verter en una bandeja o moldes para paletas.