Ya casi es Halloween y todos los años trato de pensar en una pequeña receta divertida para sus pequeños. Estos pequeños gratinados con forma de monstruo esconden una mezcla de col verde, calabaza, manzana y queso para Tartiflette debajo de una masa quebrada. La manzana trae una nota dulce que me encantó. En cuanto al queso, no hace falta decir que es el toque fundente y delicioso! Es un gratinado que me gustó mucho.
Para 4 personas :
- 1 masa quebrada (o 2 masas quebradas compradas en la tienda)
- 200 g de col verde rallada
- 200 g de calabaza en dados
- 2 manzanas Royal Gala
- 1/3 Queso para Tartiflette Ermitage
- 1 yema de huevo
- Sal pimienta
1- Pelar las manzanas, quitarles el corazón y cortar la pulpa en cubos.
2- Caliente el aceite en una sartén y agregue el repollo, la calabaza y la manzana. Cocine las verduras durante 30 a 40 minutos, agregando un chorrito de agua a la mitad de la cocción. Sal pimienta. La calabaza debe estar tierna.
3- Divida las verduras en moldes grandes o cacerolas pequeñas.
4- Añadir el queso tartiflette por encima.
5- Cortar círculos del tamaño de los moldes de la masa quebrada, formando 6 patas. Imagina un sol con 6 ramas.
6- Cubrir los moldes con estos círculos de pasta. Sella bien los bordes.
7- Pintar la masa quebrada con yema de huevo.
8- Precalienta tu horno a 180°C y hornea por 25 minutos.