Más ligeros y menos grasosos que los chips de maíz mexicanos, los chips Coraya caseros son un acompañamiento delicioso para el guacamole. Son muy fáciles de hacer y dan unas patatas fritas ligeras y crujientes.
Si has visto mi receta de palitos de pan con chips de Coraya, aquí encontrarás el mismo método de preparación de los chips: los palitos de Coraya se desenrollan y se secan al horno. Solo me encargué de cortarlas previamente con un cortador de galletas para que fuera más fácil disfrutarlas como aperitivo.
Para 12 tostadas
- 12 palitos de sabor
- 1 aguacate maduro
- 1 lima
- 1 cucharada de crema espesa
- pimienta de cayena en polvo
- Sal
1- Desdoble los palitos de sabor y use un cortador de galletas para cortar un círculo en cada palito.
2- Coloque estos círculos en una bandeja para hornear cubierta con papel pergamino.
3- Precalienta tu horno a 180°C y hornea de 10 a 15 minutos. La Coraya debe quedar crocante.
4- Deja que se enfríen por completo.
5- Recoger la pulpa del aguacate en una ensaladera y añadir el jugo de lima, la nata fresca, la guindilla y la sal.
6- Machacar con un tenedor hasta obtener un puré.
7- Divida este puré sobre las patatas fritas Coraya y sirva sin esperar demasiado.
Consejo: siéntase libre de probar y ajustar los condimentos a su gusto.