Verrines frescos para ofrecer como aperitivo con una base de queso fresco de cabra y verduras cocidas. Muy fácil de hacer y bastante rápido. Esta receta también se puede ofrecer como brindis.
Para 6 vasos:
- 200g de queso fresco de cabra Soignon
- 1 chalota
- 1 cucharada de aceite de nuez
- 6 hojas de menta (+ 6 hojitas para decorar)
- 8 frutos rojos
- 2 pizcas de flor de sal
- 6 gotas de vinagre balsámico
- 1 calabacín pequeño
- 2 lonchas de carne de los Grisones
- 1 pizca de pimiento de Espelette
1- Triturar el queso de cabra fresco con la chalota picada, el aceite de nuez, la hierbabuena picada, la flor de sal y los frutos rojos triturados.
2- Cortar el calabacín en 10 rodajas de 1 cm de grosor. Cortar estas lonchas en brunoise (dados pequeños regulares)
3- Calentar un poco de aceite de oliva en una sartén pequeña y dorar los calabacines troceados. Deben quedar un poco crujientes y tomar un bonito color.
4- Cortar 3 lonchas a lo largo de cada carne de grisón.
5- Colocar la crema de queso de cabra en el fondo de los vasitos (utilizar una manga pastelera para obtener un resultado limpio). Añadir el calabacín troceado y una tira de carne de los Grisones enrollada. Añadir una gota de vinagre a cada verrine. Espolvorear con pimiento de Espelette y decorar con una ramita de menta.