Para picar o para un pequeño aperitivo, estas galletitas son una pequeña delicia. La mitad de la mantequilla se reemplazó con mantequilla de maní y agregué algunas aceitunas negras. La versión con mantequilla de maní y tomates confitados también es deliciosa.
Si no tienes sémola fina de trigo duro, puedes reemplazarla con polenta, eso también funciona.
Para 20 galletas:
- 120 g de harina T45
- 40 g de sémola fina de trigo duro
- 30 g de queso parmesano rallado
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 50 g de mantequilla
- 50 g de mantequilla de maní
- 1 huevo
- 35 g de aceitunas negras sin hueso
1- Mezclar en un bol la harina, la sémola, el parmesano, dos pizcas de sal y la levadura.
2- Añadir la mantequilla picada y la mantequilla de maní. Arena entre los dedos. Deberías obtener sémola gruesa.
3- Añadir el huevo y las aceitunas picadas finamente. Amasar hasta obtener una bola suave.
4- Tome un trozo de masa y enróllelo en una bola. Debe ser del tamaño de una pequeña pelota de ping pong.
5- Aplanarlo en una bandeja para hornear. Repita con el resto de la masa.
6- Precalienta tu horno a 180°C y hornea por 15 minutos.
7- Déjalos enfriar sobre una rejilla.