No es realmente una migaja real en el sentido de que usé pan rallado grueso para obtener la textura crujiente. Pero este plato no deja de ser delicioso con su salsa de pan de especias, manzanas confitadas y avellanas crujientes.
Es muy sencillo de hacer, no lleva mucho tiempo y el resultado es muy bonito.
Para 2 personas :
- 2 pechugas de pollo
- 1 rebanada de pan de jengibre
- 1/2 manzanas
- 1 cucharada de avellanas
- 2 cucharadas de pan rallado de grano grueso
1- Calienta una sartén con un poco de aceite y cocina las pechugas de pollo troceadas.
2- Cuando las piezas estén doradas, desmenuzar el pan de jengibre y añadirlo a la sartén con las avellanas trituradas.
3- Cortar en trocitos la manzana a medio pelar y añadirla con el pollo.
4- Verter un poco de agua (unos 3-4cl). Sal pimienta.
5- Cocinar unos minutos para obtener una salsa almibarada.
6- Repartir todo en cazuelas pequeñas y espolvorear con pan rallado.
7- Precaliente su horno a 180°C y hornee por 5-10 min.