Los malvaviscos caseros son suaves, ligeros, tiernos y dulces. ¡Perfecto para ofrecer a tu media naranja mañana! 🙂
Estos malvaviscos están aromatizados con sirope de maracuyá que encontrarás en particular bajo la marca Monin. Un muy buen jarabe muy fragante.
El azúcar mascabado es un azúcar integral de caña con un color muy oscuro y una fragancia pronunciada y única. Se encuentra fácilmente en tiendas orgánicas. En estos malvaviscos realza deliciosamente el aroma de maracuyá y aporta un bonito color caramelo. Es opcional, puedes sustituirlo por azúcar glass o azúcar de caña clásica.
Para 30 a 40 malvaviscos:
- 35 g de azúcar en polvo
- 90 g de azúcar mascabado (tienda ecológica)
- 8 g de hojas de gelatina
- 2 claras de huevo
- 5cl de agua
- 3 cl de sirope de maracuyá
- Azúcar en polvo
1- Remojar las hojas de gelatina en agua fría.
2- Verter el agua, los azúcares, el almíbar de maracuyá en un cazo y calentar hasta alcanzar los 110-111°C.
3- Durante este tiempo, empieza a batir las claras en tu robot con bastante firmeza.
4- Cuando alcance la temperatura del almíbar, viértelo en un chorro fino sin dejar de batir.
5- Exprimir las hojas de gelatina y ponerlas en un cazo pequeño con 1 o 2 cucharadas de agua. Derrítelo y viértelo también en el merengue italiano en un chorro fino.
6- Continúe batiendo hasta que la mezcla espese y se caliente.
7- Verter toda la preparación en un marco rectangular colocado sobre un plato cubierto con papel pergamino.
8- Igualar, espolvorear con azúcar glas y dejar secar toda la noche en el frigorífico.
9- Al día siguiente, volver a espolvorear por encima azúcar glas. Desmoldar sobre la superficie de trabajo y luego cortar en trozos, con un cuchillo o cortador de galletas.
10- Terminar rebozando las piezas en azúcar glas y reservar en la nevera.