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Es una receta del último Cuisine By Lignac que me llamó la atención: las trufas de pan de jengibre. Así que tomé su idea básica y la apliqué a mi pan de jengibre casero con avellanas. Revisé las proporciones a mi manera. También los espolvoreé con cacao.
¡Soy un fan! En estas bolitas se concentran todo un montón de sabores navideños: avellanas, miel, naranjas confitadas, cacao, especias… ¡Las trufas se derriten! La consistencia es más suave que las trufas tradicionales. ¡Recomendado para tus cestas gourmet!
Almacenamiento: una semana en el frigorífico.
Para 12 trufas:
1- Desmenuzar el pan de especias y verterlo en un bol. Cubrir con zumo de naranja y piel de naranja confitada cortada en cubos pequeños.
2- Con un tenedor triturar todo hasta obtener una mezcla más o menos homogénea (todavía hay que conservar trozos). Forma bolitas entre tus dedos. Es un poco pegajoso pero se hace muy fácilmente.
3- Rebozar cada bolita en el cacao al menos dos veces: estando mojada la trufa, se moja también el cacao.
4- Reservarlos en el frigorífico.
