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Siempre es cuando llega la primavera y el verano cuando resurgen mis ansias de mermelada casera. Fresas, siempre tengo algunas en mi congelador, cosechadas el año anterior a la recolección. Me gusta combinarlas con diferentes frutas y para esta primera mermelada del 2013 elegí unas buenas cerezas muy dulces.
Para 1 bote y medio:
- 400 g de fresas
- 300 g de cerezas (peso sin hueso)
- 350 g de azúcar
1- Lavar y pelar las fresas. Cortarlos en 4.
2- Lavar las cerezas y deshuesarlas si aún no lo has hecho.
3- Vierta todos los ingredientes en una cacerola y comience a cocinar a fuego lento, revolviendo regularmente.
4- Cuando las frutas hayan sacado su jugo, cocine a fuego lento, teniendo cuidado de remover de vez en cuando.
5- Contar unos 30 a 40 min de cocción. Las fresas, especialmente si han sido congeladas, sueltan mucho jugo. Para probar el punto de cocción de la mermelada, vierta una gota en un plato frío y vea si se mantiene líquida o si se congela.
5- Una vez cocida, vierte la mermelada en un bote, ciérralo y dale la vuelta.
6- Dejar enfriar y guardar en lugar fresco o directamente en el frigorífico.
