Amaretti son parte de estas galletas de increíble facilidad y rapidez de ejecución para un resultado realmente grandioso. ¡Esta receta lo tiene todo!
Estas galletas a base de polvo de almendras y clara de huevo se conservan muy bien durante varias semanas en una caja de hierro. Mantienen toda su suavidad y el crujido de su corteza.
Te sugiero que pongas 3 gotas de extracto de almendra amarga. Yo los encuentro perfectos así, pero si te gusta tener un sabor un poco más pronunciado, prefiere 4 o 5 gotas, no más.
Para 10 amaretti:
- 1 clara de huevo, tamaño mediano
- 100 g de almendras molidas
- 45 g de azúcar en polvo
- 3 gotas de extracto de almendra amarga (opcional)
- Azúcar en polvo
1- Batir la clara con un tenedor durante unos segundos para que haga un poco de espuma.
2- Añadir el azúcar, la almendra molida y el extracto.
3- Usando una espátula o una espátula, mezcle hasta formar una bola de masa.
4- Extiende una hoja de papel pergamino en un plato.
5- Tomar bolitas de masa con los dedos (puedes humedecerlas para facilitar su manipulación).
6- Aplanarlos un poco en el plato.
7- Espolvorearlos con azúcar glas.
8- Precalienta tu horno a 180°C y hornea por 10 minutos.
9- Luego, bajar el horno a 160°C y continuar por otros 3-4 minutos.
10- Déjalos enfriar.