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Descubrí estas galletitas en el blog high heels & cocoa. Apenas visto, hecho… Una pequeña maravilla a la hora del café. Los ofrece en versiones almendra y avellana. Yo las hice versión coco y no me arrepiento. Me encanta la combinación de coco y chocolate. Son cupcakes italianos, así que no me extraña que sepan bien ;).
Probaré la próxima vez con avellana y también con polvo de pistacho.
Rellené con una clásica ganache de chocolate. Depende de ti probar otros sabores, un poco como los macarrones.
Por 12 besos:
- 50 g de coco rallado
- 50 g de polvo de almendras
- 80 g de mantequilla blanda
- 80g de azúcar
- 100g de harina
- 1 yema de huevo
1- Mezclar el coco, la almendra en polvo, el azúcar y la harina.
2- Trabajar esta mezcla con la mantequilla a mano. Cuando la mantequilla esté bien incorporada, agregar la yema de huevo. No trabajar demasiado la masa y formar una bola. Envuélvelo en papel film y refrigera por 1 hora.
3- Precalentar el horno a 170°. Saca las nueces de la masa y forma bolitas pequeñas. Colóquelos en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Aplané un poco mis bolitas pero al final no es necesario porque la masa se “esparce” un poco.
4- Hornear por 15min. Cuando salen del horno, los pasteles aún están suaves, como galletas. Pero se vuelven firmes a medida que se enfrían.
5- Hacer la ganache con 70g de chocolate fundido al baño maría y 2 cucharadas de nata líquida. Mezclar y esperar a que la ganache se endurezca un poco.
6- Colocar esta ganache sobre la mitad de los besos, con el lado liso hacia abajo. Cubra los pasteles con un segundo pastel. Deja que la ganache cuaje en la nevera.
¡Estas pequeñas maravillas se han ido a una velocidad increíble! En el desayuno, a las 11, a la hora de la merienda… Todas las excusas son buenas 😉
