Es una mezcla de sabores muy exóticos los que se te ofrecen en este sorbete. Tenía una piña muy madura en mi refrigerador. Tenía dos opciones: o hacer una mermelada de piña, pero ya la había hecho, o probar un sorbete de piña. Y fue la vuelta del sol y el calor del día lo que rápidamente me ayudó a decidirme.
Agregar el ron no solo le da al sorbete un sabor realmente agradable, sino también una textura más suave porque el alcohol no se congela. El sorbete tarda más en cuajar y cuajar. Sin embargo, incluso tomado, recupera rápidamente su consistencia suave y ligera.
Para 1 litro de helado:
- 200g de azúcar
- 25cl de agua
- 1 piña grande
- 1 lima
- 1 tapón de ron blanco
1- Verter el agua y el azúcar en un cazo y llevar a ebullición. El azúcar debe disolverse. Dejar enfriar.
2- Retire la piel de la piña y corte la pulpa y el corazón en trozos.
3- Viértelos en una licuadora con el jugo de limón y el ron.
4- Mezclar hasta obtener una consistencia agradable y sin grumos.
5- Añadir el almíbar y volver a mezclar.
6- Dejar enfriar por completo antes de colocar en una heladera.