Hice este pastel para nuestras vacaciones. Dormimos en un hotel Campanile la noche de nuestra partida, solo para cubrir el camino dos veces. Para ahorrar un poco, planeamos comer en la habitación tranquilamente en lugar de en el restaurante que no es famoso.
Así que necesitábamos algo conveniente para llevar y comer. La tarta es perfecta para esta ocasión, acompañada de unos tomates.
Elegí este en referencia a la tarta de queso de cabra, guisantes y nigella que estaba exquisita. Modifiqué diferentes ingredientes y aquí está el resultado.
Espolvoreé algunos piñones para agregar un poco de crocante y pimentón para que la corteza quede bien dorada.
Para 1 pastel:
- 180g de harina
- 3 huevos
- 10cl de leche
- 5cl de aceite de oliva
- sal pimienta
- 1 cucharadita de pimentón
- 2 cucharadas de piñones
- 18 ramitas de cebollino
- 150 g de guisantes congelados
- unos 15 tomates cherry
- 1 cebolla
- 1 paquete de levadura en polvo
1- Mezclar la harina, la levadura, los huevos, la leche, el aceite. Añadir los guisantes aún congelados, los tomates cherry cortados en 4, el pimentón, la cebolla picada y el cebollino picado. Agregue sal y pimienta.
2- Verter en un molde de tarta, espolvorear con un poco de pimentón y repartir los piñones.
3- Hornear durante unos 35 minutos a 180°C.