Antes de irme de vacaciones siempre trato de terminar las sobras, lo que no quiero (o no puedo) llevar. Hice esta pizza en esta ocasión y la congelé, así que cuando volvimos el domingo por la noche, ¡sabía que nos esperaba una buena pizza!
Como me quedaban unos champiñones y patatas, me dije “por qué no”. Probemos la patata en una pizza. Los corté en rodajas muy finas para no hacer una comida tapada. Se trata de poner una fina capa de patata justo encima del coulis. Luego pongo cebollas y champiñones en buena cantidad. Terminé con mimolette.
Para 2 personas :
- 1 masa de pizza
- 6 champiñones
- 4 papas pequeñas
- 1 bloque pequeño de coulis de tomate
- 1 cebolla
- mimolette vieja rallada
- sal pimienta
- orégano
1- Estirar la masa de pizza.
2- Verter sobre el coulis de tomate.
3- Pelar y cortar en rodajas finas las patatas. Ayúdate de una mandolina o una cortadora eléctrica. Sal ligeramente.
4- Colócalos sobre la pizza.
5- Rebana la cebolla y añádela a la pizza.
6- Trocear los champiñones y colocarlos encima.
7- Terminar con la mimolette rallada y un poco de orégano seco. Pimienta.
8- Precalienta tu horno a 200°C y hornea por 15-20 min.