Mi pequeño truco para alegrar el sándwich de jamón y queso es darle sabor a la mantequilla. ¡Es tan simple y hace toda la diferencia! Aquí, hice una mantequilla con hierbas (menta, albahaca, perejil) y limón. También le agregué algunos espárragos. Preparé espárragos frescos pero irías más rápido con espárragos enlatados.
Para el queso usé algo nuevo de Ermitage: rebanadas de fondam. Muy práctico para bocadillos, fríos o calientes.
Y si quieres otras mantequillas de sabores, puedes consultar la sección de quesos y mantequillas.
Para 2 bocadillos:
- 2 medias baguettes
- 50 g de mantequilla blanda
- 1 limón
- 1 cucharada de menta picada
- 1 cucharada de perejil picado
- 1 cucharada de albahaca picada
- 4 rebanadas de fondam Ermitage*
- 4 espárragos blancos
- 2 rebanadas de jamón
1- Mezclar la mantequilla con las hierbas y la ralladura de limón. Libro.
2- Llevar a ebullición una sartén llena de agua con sal.
3- Cortar el tallo de los espárragos y pelarlos.
4- Sumergirlas en agua y cocinar de 12 a 15 minutos dependiendo de su tamaño.
5- Escúrralos y déjelos enfriar por completo.
6- Cortar los espárragos en 4 a lo largo.
7- Cortar las baguettes en 2 y untarlas con mantequilla de hierbas.
8- Añadir dos lonchas de fondam, la loncha de jamón y 2 espárragos.
9- Cierra y disfruta.
* Este artículo fue producido en colaboración con mi socio Ermitage.