¿Recuerdas mis sándwiches sureños fríos/calientes? Los había creado como parte de una competencia para Saint-Agur para la cual formé parte del equipo “Tartine” junto a Audrey y Mamina. Hoy comienza una segunda sesión y mi receta para este último concurso es muy diferente a mi propuesta anterior.
¡Con esta receta, realmente disfruté! Sobre una rebanada de pan tostado, unto crema Saint-Agur, pongo cerezas salteadas, espinacas baby, rodajas de cebolla morada, un poco de pimienta y un poco de sirope de guinda. Esta fruta suavizará la fuerza de Saint-Agur y resulta un matrimonio más que acertado. A falta de cerezas, puedes hacer esta receta con fresas, peras, moras también.
Para votar mi receta y seguir ayudándome a ganar este concurso, entra en la web de Saint-Agur pinchando aquí. no olvides que tu pueden también intente ganar una tableta Archos chefPad entre los 10 en juego.
Para 4 personas :
- 1 media baguette
- 24 guindas (congeladas o en almíbar)
- 2 cucharaditas de miel
- 24 hojas de espinacas tiernas
- 1/2 cebolla roja
- 1 bote de 150 g de nata Saint-Agur
- Pimienta molida
1- Cortar la baguette en 2 a lo largo y luego a lo ancho para obtener 4 rebanadas de pan.
2- Pelar y picar finamente la cebolla roja.
3- Lavar las hojas de espinaca.
4- Calentar la miel en una sartén y agregar las cerezas aún congeladas. Saltear durante 5 minutos a fuego medio. Se formará un jarabe.
5- Tostar las rebanadas de pan en la tostadora.
6- Untar generosamente con la crema de Saint-Agur.
7- Extienda las cerezas, ponga las rodajas de cebolla y las hojas de espinaca.
8- Pimienta y rocía con almíbar.
9- Servir inmediatamente.
10- Sirve estos bocadillos con queso y postre.