Una compota de manzanas, avellanas trituradas y tostadas, caramelos blandos de caramelo, todo eso láminas de hojaldre, da palitos de manzana. ¡Un buen bocado para merendar! 🙂
No he dado una cantidad de azúcar para la compota porque dependerá de vuestras manzanas, así que prefiero dejaros dosificar a vuestro gusto.
Para 4 palos:
- 8 láminas de ladrillo
- 3 manzanas canadienses
- Un poco de azúcar de caña
- 16 caramelos blandos
- 1 puñado pequeño de avellanas trituradas
- almendra garapiñada
1- Pelar las manzanas, quitarles el corazón y las semillas y cortar la pulpa en trozos.
2- Echarlos en un cazo con un poco de azúcar y 10 cl de agua. Cocine durante unos 20-30 minutos, revolviendo ocasionalmente.
3- Cuando las manzanas estén tiernas, triturarlas con un tenedor para obtener una textura gruesa.
4- Superponer dos láminas de ladrillo.
5- Colocar la compota de manzana en forma de salchicha, cerca del borde del círculo.
6- Espolvorear con avellanas trituradas y caramelos troceados.
7- Dobla el borde izquierdo y el borde derecho de las láminas de masa sobre el relleno y enróllalas sobre sí mismas como si fuera un rollito de primavera.
8- Coloque el palo en un plato cubierto con papel pergamino.
9- Repetir los otros 3 palos.
10- Pintar los palitos con huevo batido y espolvorear con praliné.
11- Precalienta tu horno a 180°C y hornea por 15 minutos, tiempo para que se dore bien.