Después de mis cremitas de vainilla, aquí van las cremitas de café. Tomé café instantáneo para esta versión en lugar de un espresso. Tenía miedo de tener una mano dura con el café, pero descubrí que cuanto más esperaban las cremas en el refrigerador, más equilibrado estaba el sabor del café. Así que te aconsejo, y sé que va a ser difícil 😀, que esperes al menos 24 horas (como para la versión vainilla).
Para 4 personas :
- 20 cl de leche (entera o semidesnatada)
- 20 cl de nata líquida completa
- 4 yemas de huevo
- 3 cucharaditas de café instantáneo
- 50 g de azúcar en polvo
1- Verter la leche y la nata en un cazo y añadir el café.
2- Calentar a fuego lento.
3- Mientras tanto, bata las yemas y el azúcar hasta que la mezcla se vuelva clara y espumosa.
4- Vierta la leche caliente sobre la mezcla de huevo y azúcar. Batir la leche para evitar que se cocinen los huevos.
5- Verter esta preparación en moldes.
6- Colóquelos en una fuente para gratinar y vierta agua hasta la mitad de los moldes.
7- Precalentar el horno a 160°C y hornear durante 35-40 minutos. Las cremas deben tomarse encima pero aún un poco tambaleantes.
8- Dejar enfriar antes de guardarlos 24 horas en el frigorífico. Recuerde colocar una película adhesiva en cada molde.