Este postre es similar a un pastel sin estructura. A continuación, pongo disco bretón cortado en trozos. Agregué piña caramelizada encima, aromatizada con jarabe de ron casero. Acompañé este postre con una quenelle de merengue dorado con soplete y aromatizado con canela. Un pequeño postre que hace su efecto, que posiblemente puede acompañarse de una bola de helado de vainilla.
Para 6 vasos:
- 6 paletas bretonas
- 2 piñas
- 30 g de azúcar en polvo
- 2 claras de huevo
- Duplicar el peso de las claras en azúcar
- 1/2 cucharadita de canela molida
- sirope de ron casero
1- Pelar las piñas, quitarles el corazón y cortar la pulpa en cubos.
2- Calentar una sartén con un poco de mantequilla y poner las piñas a caramelizar con los 30 g de azúcar glass.
3- Dejar cocer unos 40 minutos removiendo regularmente.
4- Añadir un poco de agua a mitad de la cocción para hacer un almíbar.
5- Triturar los palets bretones y verterlos en 6 verrines.
6- Agrega la piña encima.
7- Rociar con un poco de sirope de ron y reservar en el frigorífico.
El merengue (Receta en imágenes pinchando aquí)
1- Pesar las claras y anotar el peso.
2- Calcula el doble de este peso: será el del azúcar.
3- Llevar el agua a fuego lento en una cacerola.
4- Vierta las claras de huevo en su tazón y comience a batir con una batidora eléctrica.
5- Añadir el azúcar poco a poco y colocar el bol al baño maría, sobre la sartén.
6- En este punto seguir batiendo: la mezcla toma volumen, el merengue se vuelve muy blanco, brillante, incluso nacarado y más compacto.
7- Retirar el bol de la cacerola con agua cuando la preparación esté tibia.
8- Seguir batiendo siempre hasta que la preparación se enfríe por completo. Agregue la canela al final y dé un batido final.
9- Hacer quenelles con dos cucharadas y colocarlas sobre los vasitos.
10- Con un soplete dorar los merengues.
11- Sirva inmediatamente o refrigere por unas horas más antes de servir.